Elisa Araya, Rectora UMCE: "En pandemia toda la universidad fue Ucampus"
“Con o sin pandemia, el uso de la tecnología para el aprendizaje debe continuar”, bajo esta premisa, la nueva rectora de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación Elisa Araya Cortez conversó con Ucampus para entregar su visión sobre el actual momento de la educación y de qué manera la tecnología ha sido crucial para seguir los procesos formativos en UMCE junto a la plataforma.
El 7 de julio fue un momento histórico para la UMCE. Por primera vez la ceremonia de asunción rectoral tenía de protagonista a una mujer asumiendo el cargo máximo. Se trataba de Elisa Araya, profesora de la institución y ex estudiante de la casa de estudios, quien con otra mirada enfrenta una nueva responsabilidad: liderar los desafíos de la institución en su período 2021-2025.
Semanas más tarde admitiría que aún sigue adaptándose a sus nuevas funciones, confiesa que todavía continua con el cierre del ramo práctico que imparte sobre Identidad docente. “Voy dejando eso que es tan bonito que es el contacto directo con los estudiantes. Todo eso que te conecta a lo concreto y cotidiano de la docencia se va quedando atrás”, señala.
Pero no todo son recuerdos emotivos, la Rectora Araya no titubea en mostrar su entusiasmo en el nuevo cargo. Admite su interés en que su sello sea “reinstalar la educación pública” y que ha conversado con todo quien “ha querido conversar conmigo”.
Primeras semanas como la nueva Rectora de la UMCE, imaginamos que han sido días agitados
Vamos bien, estoy contenta. Creo que es una experiencia interesante. Primero, soy una profesora y mi intención es ejercer la rectoría con ese rol, tal como yo entiendo la docencia: como quien acompaña al desarrollo de un otro. Así, mi gestión acompañará el desarrollo de esta institución.
Es la primera mujer rectora de la UMCE, ¿cuál es su opinión frente a este hecho?
Me gusta que se esté moviendo la aguja y que haya cada vez más posibilidad que las mujeres accedan a cargos de toma de decisiones. Sorprende que ya en el siglo XXI esto todavía sea más bien una excepción, significa que aún falta muchísimo por avanzar
En este 2021, la pandemia aún es un tema trascendental al hablar sobre educación. Hoy en Chile, ¿cuáles son los desafíos en educación remota?
Creo que la pandemia nos apuró a incorporar de forma sostenida el uso de las tecnologías. Simplemente nos vimos obligados, no quedó otro remedio.
Sin embargo, aún queda por convencer a algunos que esto debe ser una práctica regular y sistemática. Con o sin pandemia, el uso de la tecnología para el aprendizaje debe continuar.
¿Cómo se logra avanzar en ese sentido?
He reflexionado mucho sobre eso, creo que lo que falta para dar ese paso es generar habilidades. Lo que hay que hacer es aprender a combinar muy bien presencialidad con el aprendizaje virtual, en el sentido de que hoy lo presencial debe tener un carácter práctico, mientras que lo telemático se enfocaría en la posibilidad de profundizar, confrontar distintas teorías. Aún hay mucho que discutir sobre las didácticas combinadas.
La pandemia nos obligó, pero independiente a eso, el uso de las tecnologías llegó y cambió a la manera en que debemos enseñar.
¿Está en los planes de la universidad integrar el uso de tecnologías para la educación a las mallas de formación para los nuevos docentes?
Está en los programas de formación. El uso de las TIC es una de las competencias genéricas de todas nuestras carreras, pero no podemos conformarnos con conocer el uso de las herramientas. La reflexión didáctica debe estar en cómo sacar el mayor provechosa a las tecnologías. Aunque aún no damos con el clavo justo sobre cómo aprovechar de la manera provechosa estas herramientas.
¿Es uno de sus objetivos progresar en el área?
Está en nuestros planes avanzar en una propuesta curricular didáctica para la educación del siglo XXI. Ya tenemos algo, pero debemos evaluarlas, revisar si son propuestas nuevas o estamos sobre lo mismo. Porque el momento pandémico nos ha llevado a utilizar herramientas. Los estudiantes saben usar herramientas, pero como no hemos logrado hacer talleres presenciales, no hemos logrado evaluar si han sido lo suficientemente eficaces y pertinentes para nuestro objetivo: obtener aprendizaje.
¿Cree que la educación híbrida es el futuro?
Por supuesto que sí, tiene que ser híbrida. Incluso en la enseñanza escolar, si vas a tener a personas reunidas en una sala, no puede ser para escuchar algo que pueden leer por sí mismos o que pueden descubrir viendo un buen documental. La reunión debe ser para reflexionar, para crear y trabajar colaborativamente, que puede ser virtual, pero aún sigue siendo importante estar cara a cara con un otro o rayar un papel. Hacer eso todavía es relevante para establecer aprendizaje. Es por eso por lo que tenemos que llegar a un punto donde la presencialidad y virtualidad se complementen de la forma más virtuosa posible.
Con la llegada de la plataforma Ucampus, ¿cómo describiría el antes y después de la UMCE?
Nosotros comenzamos a trabajar con la plataforma y analizar su uso manera sistemática durante el 2019, en pleno Estallido Social y en diferentes situaciones de paros prolongados. Por eso, ya estábamos discutiendo formas de acortar brechas y que los estudiantes continúen sus avances. Ya desde ese momento teníamos la perspectiva que en algún minuto íbamos a negociar con los estudiantes que las modalidades de trabajo fuesen mixtas.
Como docente ya tiene experiencia utilizando Ucampus, ¿cómo las soluciones de la plataforma han apoyado a la universidad durante este último año de pandemia?
En pandemia toda la universidad fue Ucampus. Nosotros como institución trabajamos permanentemente en la plataforma, es un vínculo entre pares, como también es la posibilidad de hacer clases y un espacio para hacer reuniones sociales entre colegas. Creo que, si nosotros no hubiésemos contado con Ucampus, estaríamos en una condición... casi no la puedo imaginar. Le tengo mucho aprecio y una gran valoración a Ucampus.
